Un Vistazo al Curso de Primera Cámara.

“Te advierto, quien quiera que fueres, Oh! Tú que deseas sondear los arcanos de la Naturaleza, que si no hallas dentro de ti mismo, aquello que buscas, tampoco podrás hallarlo fuera. Si tu ignoras las excelencias de tu propia casa, ¿Cómo pretendes encontrar otras excelencias?. En ti se halla oculto el tesoro de los tesoros. Oh! Hombre, conócete a ti mismo y conocerás al Universo y a los Dioses.”

Templo de Delfos. (Grecia)

La Gnosis hace énfasis en la transformación del ser humano y lo que más acentúa en su enseñanza es que el ser humano se conozca a sí mismo.
Quiero aclarar que toda persona cree conocerse porque sabe quién es su papá, quién es su mamá, donde nació y por ende, muchas veces se ha mirado al espejo; pero, quiero decir que esto es un conocimiento muy incipiente, muy chico, en comparación con lo que en realidad somos.
Quiero decirles que en este cuerpo de carne y hueso, que se llama “celular o físico”, se encierran los Misterios más trascendentales que existen bajo el sol. Nosotros, los Instructores de la Humanidad y Oficiantes del Templo, sabemos en forma directa, que en realidad, el ser humano no se conoce a sí mismo y todavía es un ser no logrado en su totalidad. (v.m. Lakhsmi)

La Religión está definida como el sistema y la práctica que lleva al ser humano a la unión con Dios. El Diccionarío de la Real Academia Española define la religión como un culto que se le tributa a la divinidad como obligación de conciencia y el cumplimiento de un deber.

El V.M. Samael define la Religión como el sistema que ha llevado a un hombre o a una mujer a su Autorrealización.

Amigo lector, ¿se ha detenido usted un instante a reflexionar sobre la religión que practica, sea cual fuere? Es necesario comprender que el Amor es la religión más elevada que existe. El Amor nace, no se hace.

Cada persona que existe en el Universo tiene nexos estrechos con el amor, pero el amor como lo definen los hombres se puede confundir en un momento dado con la pasión, con el sentimentalismo, con las falacias de distracción egóicas que sólo sirven para mantener al ser humano en un profundo sueño y, lo que es peor, completamente convencido de que está en la verdad.

Se ha podido comprender, a través de la experiencia y de los dichos filosóficos, que Dios es Amor; esto nos hace suponer que para poder sentir el verdadero amor es necesario hacer una estructuración psicológica, mental y física, con el fin de eliminar de nuestra naturaleza interior todos los elementos que interfieren en la auténtica manifestación del amor.

Podríamos definir algunos de estos elementos: la pasión, el orgullo, el amor propio, la mala voluntad, el odio, la ira, etc. Estos Yoes interfieren, por medio de la mente y de los senti

mientos, para que el amor puro no pueda manifestarse en el corazón de una persona.

Pueden existir miles y miles de religiones en el mundo, pe- ro ninguna de ellas podría asumir la responsabilidad de hacer que una persona se una a Dios.

mientos, para que el amor puro no pueda manifestarse en el corazón de una persona.

Pueden existir miles y miles de religiones en el mundo, pero ninguna de ellas podría asumir la responsabilidad de hacer que una persona se una a Dios.

“la Gnosis es un funcionalismo muy natural de la conciencia”

La Doctrina del Ojo y la Doctrina del Corazón

Hay dos clases de sabidurías de regeneración: la Doctrina del Ojo y la Doctrina del Corazón.

La Doctrina del Ojo es la relacionada con el intelecto e incluye todos los conocimientos externos.

La Doctrina del Corazón, tiene que ver con la Intuición, la Conciencia y el Ser.

La Doctrina del Ojo , robustece la mente, materia, la morada del deseo; ella piensa, razona, saca conclusiones y conduce a la acción errada, todo lo quiere resolver por sí misma y no tiene en cuenta para nada la voz del Maestro Interno. El Maestro Interno no piensa ni razona ni discurre, sino que su voz es la voz de la Intuición.

Por lo antes expuesto, los Gnósticos son aquellos que tienen la capacidad de expresar la gnosis en sus vidas, aquellos que son capaces de expresar la sabiduría divina, aquellos que han llegado por sus propios medios a la auto gnosis, es decir el auto conocimiento. Se han hecho consientes de sí mismos, de lo que son y de lo que es el mundo y el universo que los rodea.

Estudiando esto que es la Gnosis, nos damos cuenta que la Gnosis, es una sabiduría divina, entonces proviene de la parte divina que cada uno de nosotros posee en su interior. Esa parte divina que tenemos, es la que nos ha dado vida, es la que nos mantiene vivos, porque nadie en este mundo puede crear vida, el hombre lo que puede hacer es manipular la vida, pero no puede crearla. Por ende, desde que estamos vivos estamos junto a la sabiduría, o la sabiduría está dentro nuestro.

Es por eso, que cuentan los Griegos, que, en una reunión en el Olimpo, allí donde Vivian los Dioses Precedido por Zeus, se reunieron todos, para tratar el tema del hombre y su ambición por controlar y poseer todo. Los Dioses analizaron su comportamiento y llegaron a la conclusión de que el hombre algún día, iba a llegar hasta el Olimpo y le iba a robar a los Dioses su tesoro más preciado “La Sabiduría”. Entonces todos ellos comenzaron a debatir, como podían hacer para esconder la Sabiduría del hombre, para que este no la profane. Unos decían que había que esconderla en lo profundo del mar, pero al analizar la ambición humana, llegaban a la conclusión de que el hombre algún día iría hasta allí y la profanaría. Otros opinaban que en lo más alto de las montañas, pero al analizarlo, llegaban a la misma conclusión. Todos los lugares que se les ocurría para ocultar la sabiduría, eran lugares donde el hombre tarde o temprano llegaría. Luego de reflexionar un tiempo, le levanto uno de los Dioses, el más sabio de todos y dijo, ya se dónde podemos ocultar la sabiduría y que solo la encuentren los hombres nobles. En su propio corazón, ya que los hombres ambiciosos buscan todo en el exterior, fuera de sí mismos, pero solo los hombres nobles buscan en su Interior.

La Gnosis no hay que buscarla afuera, la Gnosis no hay que aprenderla, la Gnosis hay que desarrollarla. Ella ya está dentro nuestro, ya la tenemos, somos sabios en potencia, solo tenemos que crear las condiciones, para que esa esencia interior se manifieste, con toda su conciencia y con toda su sabiduría, es decir con toda su Gnosis.

Para poder desarrollar la Gnosis interior, ósea la Sabiduría interior, debemos desarrollar a nuestra esencia, a nuestra conciencia. Hay que ir poniendo en práctica las cosas que van a hacer que esa esencia se desarrolle en nosotros. Esto es parecido a cultivar un árbol. Nosotros no podemos hacer que la semilla germine, lo que podemos hacer es crear las condiciones para que la semilla germine sola. Para germinar, la semilla necesita una tierra fértil, agua, sol, etc. Lo mismo pasa con nuestra esencia. Para que ella se desarrolle plenamente, necesita de condiciones apropiadas.

Concluimos que a traves del Curso de Primera Camara, cada persona podrá tener la oportunidad de conocer a grandes rasgos temas sobre: sicología, antropología, técnicas de meditación, elementoterapia (tratado de las plantas naturales), los misterios de la vida y de la muerte, la ley del karma, las dimensiones de la naturaleza, etc., todo encaminado a la regeneración del ser humano.

El curso tiene una duración aproximada de tres meses, durante los cuales se reciben dos conferencias por semana, para un total de 23 conferencias aproximadamente.

La enseñanza gnóstica no tiene ningún costo, es una labor de conciencia, enfocada a construir una humanidad que busque su despertar de la conciencia y la transformación radical de su vida.

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